¿Dónde jugarán los niños?
Autora: Maylín Ros Torres.
Preámbulo de un parque infantil
Songo – La Maya, 23 mar 2022.- Desde el pasado año 2021, Cuba comenzó a vivir las intervenciones comunitarias, una forma de desarrollo que implica la participación de los miembros de la comunidad y que al mismo tiempo involucra al Gobierno y el Partido en la solución de problemáticas que hasta el momento subsistían en nuestros pueblos y comunidades. Es una estrategia que permite acercarse a los barrios, actualizar los diagnósticos y cambiar para bien la realidad del entorno.
En el presente año aquí en Songo – La Maya, se planificaron siete comunidades a transformar, ella son Morón de Palencia, Sabanilla, 4 caminos, La Perla, El Manguito, Loma del Gato y Los Reynaldo.
Vale aclarar que son comunidades a transformar, no una intervención comunitaria en sí, porque esta última, la intervención, se refiere a toda el área mientras que la transformación se dirige a pequeños cambios dentro de las comunidades para cambiar su imagen y resolver problemas menores de acuerdo con el presupuesto.
A todos los mencionados se llegó a través del diagnóstico aunque no en todas se han realizado acciones. Hago estas aclaraciones previas para el mejor entendimiento de lo que diré a continuación.
Una de las acciones propuestas en esos espacios es la apertura de un parque infantil con columpios, cachumbambés y botecitos, acción a cargo de la empresa de comunales, que tiene a su disposición el presupuesto para llevarlo a cabo.
Así llegaron los aparatos al Manguito, colocados en el piso frente al café, según fuentes que nos dicen que es transitorio porque el parque no será emplazado en ese sitio, pero no es lo que se comenta en otros espacios y es una preocupación que mueve el criterio de muchos pobladores.
Los porqués a la negativa popular
Uno podría preguntarse ¿por qué tanto revuelo?. Y es que el café es sitio permanente de hombres que consumen alcohol y a su lado está el termo donde se vendía la cerveza, situación que puede regresar en breve, si todo continúa hacia la normalidad.
También está el hecho de que el parque quedará emplazado a escasos metros (menos de 50) de la vía férrea y de la cabeza del puente, con un peligro latente que resuena aún más alto que el pitido del tren en el horizonte.
Todos estos argumentos preocupan y han hecho que incluso algunos de los habitantes de la demarcación hicieran declaraciones en las redes sociales, según ellos, no se toma en cuenta el criterio de los comunitarios para decidir dónde quedará el parquecito infantil.
Las opiniones del pueblo y la dirección en el consejo popular
Los criterios de la población pesan más hacia el lado de ubicar el parquecito lejos del espacio de la vía férrea, de la ingestión de bebidas alcohólicas y de los accidentes que han ocurrido antes en el mismo sitio donde se pretende emplazar el parque.
Algunos apoyan la decisión, diciendo que no hay mejor sitio, otros desaprueban por completo esgrimiendo el criterio de que aunque muevan el parque y el termo, los hombres seguirán yendo a ese sitio a comprar ron cuando lo sitúen y que ni la cerca perimetral, ni los ocasionales padres que acompañen a sus hijos, evitarán la conducta a veces rayando lo obsceno que a veces conlleva la ingestión de bebidas alcohólicas.
Los representantes del Consejo popular se muestran casi decididos a ubicarlo en el lugar previsto. Añaden que sí se ha consultado con el pueblo, con Comunales, con la más alta dirección del territorio y que hasta ahora, lo más certero es cambiar el termo de sitio y ubicar una cerca perimetral en el parque.
No queda claro si han realizado gestiones para consultar con otros especialistas en materia de urbanidad, cuán permitido sea emplazar un sitio de divertimento infantil tan cerca de la vía férrea.
¿Dónde jugarán los niños?
Al final no nos queda claro qué sucederá, si será frente al termo, si tendrá cerca perimetral, si se emplazará en las inmediaciones del campo de pelota o por la barriada a construir en el campo de caña un poco alejado del centro.
Lo que sí queda claro es que el café con sus más de 40 años de existencia tiene creado un hábito que aunque o haya cerveza de termo, venderá ron eventualmente. Que no podemos alejar la vía férrea ni la cabeza del puente, ni evitar accidentes de tránsito que han ocurrido en esa área.
Escuchar a la población, dialogar, buscar la asistencia de expertos en materia urbanística son los caminos a esta inconformidad. Ya escuchamos los juicios de los representantes del poblado y de algunos habitantes de la comunidad y queda abierto el debate para que la inconformidad y disparidad de criterios de ambas partes sea zanjada. Al final, son los infantes los que deben quedar complacidos pero sobre todo, protegidos.
