El médico y la enfermera de la familia una suerte a nuestro alcance

Autora: Raquel Castro MIlán.

Songo – La Maya, 3 ene 2023.- La medicina cubana no ha cesado de escribir páginas gloriosas en los 64 años de Revolución vividos por el pueblo cubano.  Una de esas páginas imborrables  es la creación a fines del año 1983 del programa del médico y la enfermera de la familia. El Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, concibió la idea de proporcionar al sistema de salud un médico de nuevo tipo, un médico capaz de brindar asistencia directa a los niños, a los ancianos y a la familia en general.

Es entonces que son elegidos por la brillantez de su trayectoria académica, diez médicos que recibieron un curso introductorio por un período de quince días en el policlínico de Lawton en la cuidad de la Habana, familiarizándose con la comunidad, junto a igual número de enfermeras, con las que organizaron su futuro universo de trabajo.

En 1984, estos diez primeros médicos de familia comenzaron su primera experiencia, en la misma área de salud en la que se prepararon. Para 1987 se gradúan en la Plaza de la Revolución los primeros diecinueve especialistas en Medicina General Integral. A partir de ese momento se construyeron en todo el país miles de consultorios equipados adecuadamente para facilitar el desarrollo de las acciones propias de la especialidad, en función de la comunidad.

Este nuevo tipo de médico y enfermera de la familia creados por Fidel ha desempeñado su función desde entonces hasta la fecha sustentado en el análisis de la situación de salud comunitaria aplicado al enfoque familiar. En sus inicios  se concibió un médico y enfermera por cada 120 familias, hoy mantiene una cobertura que alcanza casi al ciento por ciento de la población, tanto en zonas rurales como urbanas. Cuando se cumplen 64 años del triunfo de la Revolución, celebramos los 40 de la creación de tan genial idea, con el  sueño de verla crecer hasta tener más de treinta mil especialistas en Medicina General Integral formados en los mismos consultorios, y extenderse a otros pueblos del mundo y llegar hasta cerros, montañas y apartadas zonas rurales.

En la Cuba de hoy, donde la medicina de la mayor de las Antillas continúa llegando hasta lo último del planeta y los avances son considerables en materia investigativa, la especialidad de medicina general integral contribuye a mejorar la calidad de la atención que se brinda a nuestro pueblo. Los indicadores de salud que nos distinguen en el mundo, tienen mucho que ver con la labor que realizan estos profesionales, convirtiéndose en ejemplos de revolucionarios cuando asumen tareas, sin importar lo difícil que sean, fuera y dentro de nuestro país, ocupando responsabilidades en la docencia, la investigación, en situaciones de desastres y epidemias, enalteciendo siempre el nombre de nuestro comandante en jefe, en su gran empeño de formar médicos para Cuba y para el mundo.

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