Una cirugía de emergencia y muchas manos para salvar una vida
Autora: Adriana Cisneros Fernández.
Songo – La Maya 25 oct 2022.- Para Arianna Elías el viernes 21 de octubre parecía un día normal, como cualquiera, pero se convirtió quizás en la jornada más difícil en sus 19 años. La muerte quiso llevársela y muchas manos tuvieron que unirse para salvarla.
Alrededor de las 10 de la mañana estaba en una consulta de mamas en el policlínico Carlos Juan Finlay de La Maya y apareció un malestar repentino que la hizo desmayarse. Los médicos del cuerpo de guardia que la atendieron diagnosticaron un embarazo ectópico y al hacer exámenes más profundos a la paciente se percataron que ese embarazo fuera de la cavidad uterina estaba roto.
Estabilizaron a la joven y solicitaron traslado urgente con una ambulancia de apoyo vital avanzado (AVA). El transporte sanitario llegó en breve tiempo, pero la paciente presentaba una inestabilidad que hacía imposible su traslado en ese momento.
Los especialistas del Programa de Atención Materno Infantil (PAMI) de la provincia les indicaron a los médicos del policlínico de La Maya que debían prepararse para operar ahí mismo para poder salvar la vida de Arianna.
En la institución cuentan con un salón de cirugía menor y con el apoyo del personal del centro y del hospital Roberto Infante Pascual de Songo lograron readaptarlo y organizarlo en tiempo récord para realizar la cirugía.
Todos se desdoblaron para ayudar. La adrenalina se elevó al límite, les apoyaron desde el Partido y el Gobierno local, cada minuto que pasaba era una carrera contra el tiempo y a favor de la vida.
Desde Santiago de Cuba llegaron los recursos que faltaban para un proceder de este tipo y especialistas en Cirugía, Ginecobstetricia y Anestesiología, para unirse a un Ginecobstetra local, un Urólogo con experiencia en cirugías, dos enfermeras intensivistas y otra instrumentista pertenecientes al policlínico Carlos Juan Finlay que ya estaban listos en el salón con Arianna.
La operación fue complicada y riesgosa porque los signos vitales mostraban un deterioro marcado. Según nos cuenta el doctor Carlos Carrión, director de la institución asistencial, la cirugía se logró en el menor tiempo posible y la paciente estuvo en el pos operatorio alrededor de tres horas con evolución favorable.
Cuando Arianna despertó dio las gracias por saberse viva, por nacer otra vez, porque muchas manos se unieron y la salvaron. En ese instante su madre, que esperaba afuera desesperada, pudo sonreír luego de unas horas de tensión extrema. Ella dio las gracias también, por tanto y por todo, porque le arrebataron a su hija a la muerte y se la devolvieron viva. Siempre tuvo confianza en los médicos y enfermeras, aunque el miedo le acompañó todo el tiempo.
El equipo de especialistas de apoyo vital avanzado y los que vinieron a ayudar en la cirugía permanecieron ahí todo el tiempo esperando el momento de poder trasladarla hacia Santiago de Cuba.
Cuando la jovencita de Los Reynaldo estuvo lista la llevaron del salón para la ambulancia y un aplauso de muchas manos bastó para agradecer a todos los que hicieron posible una historia con final feliz.
Arianna está en cuidados intensivos en el hospital Clínico Quirúrgico Juan Bruno Zayas de la Ciudad Héroe, reportada de grave pero con una evolución estable, lo que augura amplias posibilidades de que su recuperación sea satisfactoria.
Tras su testimonio y el de parte del equipo que la operó iremos en las próximas horas, entonces esta historia será más larga y hermosa. Al sistema de salud en Cuba le faltarán recursos y medicamentos, pero a sus hombres y mujeres les sobra el amor, la pasión, la entrega por la profesión y la magia que nace cuando se hace un equipo para arrebatarle otra vida a la muerte.
